Una visión sobre el accidente ocurrido en Villa El Salvador

Resumen

El avance vertiginoso de la ciencia y tecnología ha impulsado significativos cambios en nuestros estilos de vida. El uso de equipos modernos y herramientas en nuestra vida cotidiana exige la necesidad de educarnos para asegurar el buen uso de estos con el mínimo riesgo personal y de la colectividad que nos rodea.

Actualmente, es frecuente observar que la escasa capacitación en el uso de nuevas tecnologías impide asegurar un uso eficaz de estas y por ello es responsabilidad de las autoridades del gobierno central, regionales y municipales, velar por el cumplimiento de normas y estándares de calidad, actualizados. 

 En el siniestro ocurrido en Villa El Salvador, el 23 de enero del presente año a las 6:56 am, es evidente el incumplimiento de las normas técnicas de construcción y uso de equipos que demanda el transporte de combustibles como el gas licuado de petróleo (GLP). El mal estado de las pistas es una variable que afecta notablemente el transporte en nuestras ciudades, quién no se ha visto en la necesidad de disminuir la velocidad de su vehículo en pistas deterioradas, para evitar algún accidente y/o conservar la integridad mecánica del vehículo. La visualización y conceptualización de proyectos de construcción de facilidades para transporte de combustible, deben considerar un profundo análisis de riesgos y considerar los diferentes escenarios de operación acompañados de un alto grado de responsabilidad social.

El GLP es un gas combustible altamente inflamable y de rápida combustión que además genera altas temperaturas. Está compuesto de propano y butano, se licua entre 60 - 120 psi, dependiendo de la composición de la mezcla, en estado gaseoso es más denso que el aire y en estado líquido menos denso que el agua. Al fugar del recipiente que lo contiene en estado líquido hacia la atmósfera, se combina con el oxígeno y en presencia de una llama, proveniente por ejemplo de un encendedor, chispa causada por tomacorrientes sin debida conexión a tierra, etc., explota. El límite de inflamabilidad para el propano está entre 2,15 – 9,60 % y para el butano entre 1,55 – 8,60 % de gas en aire. El área de ocurrencia del incendio dependerá de la difusión del GLP en la atmósfera, en este aspecto el volumen de gas, la dirección y velocidad del viento son factores que impacta su difusión. 

La Sociedad Química del Perú invoca a las autoridades del Ministerio de Educación a introducir en los programas de educación, en sus diferentes niveles, conceptos de responsabilidad social acordes con los avances científicos e innovación tecnológica, también hacemos un llamado a los colegios de profesionales a trabajar juntos con INACAL, OSINERGMIN en la preparación de normas relacionadas a buenas prácticas de uso de los avances tecnológicos. 

 La ocurrencia de estos eventos dependerá de cuán sensibilizada esté la población y del rigor que las autoridades ejerzan en el cumplimiento de las normas correspondientes, las cuales, a su vez, deben ser revisadas frecuentemente para evitar caer en la obsolescencia como consecuencia de la innovación tecnológica. El inadecuado transporte de balones de gas no debe permitirse debido al alto riesgo que esta infracción supone, de igual manera, postes de servicios telefónicos y/o eléctricos, afectados por la corrosión ambiental, son potenciales causas de accidentes severos.

 Trabajemos juntos por un Perú seguro, para ello, notifiquemos a las autoridades de todo tipo de infracción de las normas, también del uso indebido de materiales de construcción y actuar siempre con responsabilidad social